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Arquitectos: Estudio Bher Arquitectos
- Área: 540 m²
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Proveedores: Delta Light, Desso, Klein, Reca, Richana
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El encargo consiste en el diseño de la nueva sede central de una empresa tecnológica: unas oficinas de planta abierta para 50 personas, con tres salas de reuniones, zona de conferencias y charlas, dos rincones de concentración individual, y numerosas áreas para la interrelación entre los trabajadores, que garanticen un entorno innovador, y que favorezca la creatividad y la comunicación.
Sacando el máximo partido a las características originales del local, el objetivo final del proyecto radica en conseguir un espacio totalmente continuo, tanto a nivel visual como de recorridos.
El programa se distribuye en torno a tres volúmenes "cerrados", dos de ellos preexistentes y uno nuevo de menor tamaño estratégicamente situado, que permiten la diferenciación funcional de las estancias sin la necesidad de puertas. El resultado es una oficina permeable y sin zonas residuales, y en el que las salas de reuniones funcionan como ámbitos "semi-abiertos".
Los volúmenes se pintan de naranja neón, color corporativo, y se revisten de una doble piel de chapa deployé de acero galvanizado, dispuesta de tal forma que genera circulaciones internas y filtra visuales, además de servir como elemento integrador de los componentes tecnológicos y funcionales necesarios, tales como el “videowall” en la zona de trabajo.
Se libera completamente la fachada, para maximizar la continuidad y la entrada de luz natural. Esta idea de plano único se enfatiza mediante la colocación por el interior de un sistema paralelo de lamas correderas para el oscurecimiento y el control solar, las cuales mejoran a su vez la acústica, al haber sido fabricadas recuperando las placas fonoabsorbentes del techo existente antes de la intervención.
El resto de materiales son neutros y funcionales: se desnudan las columnas de hormigón; se prescinde de los falsos techos para aumentar la percepción de altura libre; el techo se pinta de negro junto con las instalaciones, que quedan “ocultas” tras el plano de la iluminación colgada; el suelo es gris, de moqueta, para absorber reverberación; y los demás planos verticales son blancos, a excepción del panelado de 12 metros en la zona de office y descanso, que se concibe como lienzo para un grafiti de gran formato.